Una iglesia cuya visión y misión están implementadas bajo la dirección y guianza del Espíritu Santo; fundamentada en Cristo Jesús nuestra Roca con el propósito de engrandecer el Reino de Dios en la tierra a través de la predicación de la Palabra de Dios. Todo para la Gloria, Honra y Exaltación de Él por medio de Cristo Jesús y para el beneficio de todo aquél que esté en búsqueda de Verdad, Paz, Amor y Gozo.
COVID 19 – DIRECTRICES MIEMBROS/VISITAS
Mensaje Pastoral
Amados hermanos:
El Señor les continúe bendiciendo grande y abundantemente.
Gracias al Señor Jesucristo hemos reanudado los servicios de los domingos a las 10:30 am, los cultos de oración los lunes a las 7:30 pm y los servicios de adoración los miércoles a las 7:30 pm. La Escuela Bíblica ya se está reuniendo en el salón multiuso todos los domingos a las 9:30 AM.
Les recomendamos continúen siguiendo las directrices que aparecen en este sitio web respecto al COVID-19, para así poder mantener un ambiente de orden y bienestar para todos los miembros y visitas.
Nadie mejor que usted conoce su condición de salud, por lo tanto, es su responsabilidad actuar de conformidad al decidir si asiste o no a la iglesia. Seguimos trasmitiendo por este sitio web los cultos de los domingos y de los miércoles para aquellos que no puedan asistir.
Para aquellos que todavía sientan y quieran cumplir con sus diezmos y ofrendas, sigue activado el sistema para poder diezmar y ofrendar a través de nuestro sitio web presionando la pestaña de donaciones. También puede bajar la aplicación “Church Center” y hacer las donaciones a través del mismo.
Sigamos confiando en lo que dice la Palabra de Dios en el Salmo 91:10: “No te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada.”
Mientras el mundo que no conoce a Dios vive en miedo y en caos, esta es una gran oportunidad que Dios nos está brindando para ser testigos de Su poder. Que mejor manera de mostrarles la paz que reina en nuestros corazones, y a la misma vez, dejarles ver que somos cristianos responsables y nos acatamos a las recomendaciones, siempre y cuando sean para bien y no afecten ni intervengan nuestra relación con Dios.